Al igual que, en los últimos años, se ha producido una transición de la energía eólica terrestre a la marítima, lo mismo sucederá con la energía generada en zonas cercanas a la costa hacia zonas más alejadas en el mar, en tanto que los recursos eólicos sean mayores y mejores. Por ejemplo, el primer parque eólico terrestre del mundo se instaló en New Hampshire (Estados Unidos), en diciembre de 1980, mientras que el primer parque eólico marino se instaló en Dinamarca, en 1991. Es decir, se necesitó un período de 11 años para desarrollar la tecnología necesaria para poder llevar a cabo la transición. Lo mismo está ocurriendo con las profundidades en la energía offshore pues, según pase el tiempo, se alcanzarán mayores distancias sin que ello implique un coste mucho mayor.
Al analizar las tendencias de los parques eólicos marinos, hay algo que está claro, y es que la ubicación de estas instalaciones se aleja cada vez más de la costa. A medida que nos separamos de ésta, el impacto visual de los parques se reduce y el viento se caracteriza por:
- Mayores velocidades
- Ser más laminar (sin rugosidad) y menos disperso, lo que lo convierte en un recurso más fiable
- Proporcionar más de 4.000 horas de carga completa
En la actualidad, para aprovechar los recursos eólicos más potentes y fiables, los proyectos deben desarrollarse en profundidades superiores a los 60 metros, donde las cimentaciones fijas no son viables por lo que hay que optar por cimentaciones flotantes. Sin embargo, las ventajas de las cimentaciones fijas y su continua evolución les permitirán competir en los próximos años en aguas más profundas que actualmente están reservadas únicamente a los sistemas flotantes.
A continuación, se muestran algunos de los principales parámetros de los dos sistemas:
Asimismo, las cimentaciones fijas requieren una inversión de CAPEX inferior a la de las cimentaciones flotantes. A medida que avancen las tecnologías, se reducirán los costes tanto de las cimentaciones fijas como de las flotantes, prevaleciendo las cimentaciones fijas como la opción más económica, con la posibilidad de ser utilizadas a mayores profundidades.
Finenza está colaborando con uno de los principales grupos del sector de las energías renovables, que actualmente está desarrollando dos parques eólicos marinos.
Beatriz García
Senior Director Finenza